20 | Perdices en el cielo

Perdices en el cielo
te vas
a cazar perdices en el cielo…
Letras, palabras, historias:
la mirada clavada
en el ancho horizonte de Castilla,
el corazón en el Pisuerga,
los pies por el Campo Grande
y tu amor, amor grande, con Ángeles,
siempre con Ángeles.
Y te vas
padre de la patria de este valle,
y te vas y nos dejas
un poco huérfanos.
Miles de manos que te aplauden
en la plaza,
cipreses alargados,
horas con Mario,
herejes pucelanos,
santos inocentes
y mil pájaros:
todos te lloran y te miran.
Hoy hay menos palabras
en tu diario.
Perdices en el cielo,
Miguel,
y a la vuelta de camino
Él te espera.
Descansa.
Y sigue paseando.

Miguel Delibes, maestro del castellano, padre de todos los vallisoletanos, ha fallecido la mañana del jueves en su casa de la calle Dos de Mayo, desde donde salía día a día a dar su paseo. Algunos le recordamos con su gorra, sus gafas y su cachaba paseando por el centro de su Valladolid del alma. Hoy, entre lágrimas, le hemos visto entrar a hombros de sus nietos en nuestro Ayuntamiento.
Decía en una entrevista que ha aparecido hoy que ya solo esperaba encontarse con Cristo en la última vuelta del camino…
Mañana será su funeral en la Catedral de Valladolid, y será enterrado en El Carmen junto a su mujer, cerca de Zorrilla y Rosa Chacel.
Gracias, don Miguel.

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